jueves, 20 de agosto de 2015

DOMINGO GARCÍA (Segovia): LAS OTRAS HUELLAS RUPESTRES

PREÁMBULO:

Los excepcionales afloramientos de esquisto del Cerro de San Isidro, Domingo García (Segovia) acogen petroglifos de abarcan desde el Paleolítico Superior (20.000 -15.000 a.C., aproximadamente) hasta épocas históricas, además de imperdonables garabatos contemporáneos que dañaron para siempre algunas figuras. 

Este yacimiento está declarado Bien de Interés Cultural y, junto a los de Siega Verde (Salamanca) y Foz Côa (Portugal), constituye uno de los más importantes exponentes de arte rupestre al aire libre de Europa.

Yo voy a dejar de lado estos petroglifos (se puede leer profusamente sobre ellos en soporte papel y digital) para tocar otro aspecto que merece ser estudiado: las otras huellas, las que no son representaciones zoomorfas o humanas, las que no se sitúan en los paneles verticales, sino a los pies de estos, en rocas asentadas en el suelo, y en las mesetas de estas pizarras ciertamente únicas, donde, mirando con preferencia al Este, tan bien fueron plasmados animales y hombres a lo largo de miles de años.


1. El conjunto "principal":

Está formado por las tan traídas y llevadas, las sempiternas cazoletas, realizadas al pie de uno de los paneles de grabados y también en la meseta que lo corona. Cazoletas de diferentes tamaños que parecen resaltar los límites del esquisto, comunicadas mediante canales las mayores, probablemente persiguiendo la circulación de líquidos (agua, sangre...) y su vaciamiento al suelo mediante un canal más profundo y labrado con esmero. Constituiría todo ello un Santuario (entendiendo este término como la suma de dos o más elementos diferentes dedicados al culto).

Mi visita al lugar fue muy rápida para realizar una observación más profunda, pero sí os haréis una idea con las fotografías que siguen...


1a. Cazoletas en una roca del suelo



2a. Cazoletas de diferente profundidad en la cima de la roca



3a. Cazoletas "principales" unidas mediante un canal



4a. Detalle de la cazoleta "principal" y su canal de vaciamiento



5a. Toma cenital de la cazoleta "principal" y su canal



6a. Toma lateral de la cazoleta "principal" y su
canal de vaciamiento fuera de la roca protagonista, en forma de )



7a. Otra toma de la cazoleta "principal" y su
canal de vaciamiento, junto a otras cazoletas
de menor tamaño




2. Otros lugares con cazoletas:

Algunos de los otros paneles con grabados rupestres también están acompañados con santuarios "secundarios" y/o altares, donde predominan las cazoletas, en grupo, alineadas o aisladas y canales intercomunicadores en rocas del suelo y en las cumbres.

Aquí, la intensidad de elementos parece decrecer a medida que nos alejamos del Santuario "principal"...

1b. Cazoletas de diferentes tamaños



2b. Dos cazoletas comunicadas (las señalan mi bota) y otra,
a la derecha de la fotografía.



3b. Cazoletas alineadas al pie de uno de los paneles



4b. Cazoletas sobre una roca del suelo





3. ...Y cerca de la derruida ermita de San Isidro:

La desvencijada ermita de San Isidro presenta a su alrededor tumbas antropomorfas altomedievales... y, también, de nuevo, más elementos rituales.

Esta construcción se levantó en el cerro que supera en altura a los paneles de petroglifos rupestres, con lo que se puede apuntar a que antes de ser ocupada por el citado edificio románico pudo ser otra de las ubicaciones "especiales", sagradas desde hace varios miles de años. Y es que quedan vestigios de ello...

3a.



3b.



3c.



4c.



4. CONCLUSIONES:

- El yacimiento rupestre de Domingo García es único porque, entre otras cosas, combina petroglifos del Paleolítico con otros de épocas prehistóricas e históricas que le siguieron.

- Es excepcional, asimismo, por la existencia, además, de elementos de culto prehistórico y/o protohistórico, de los cuales di frugal relación más arriba.

- Es preciso profundizar en estos últimos elementos.

- Como lugar donde el hombre representó su vida desde hace decenas de milenios, debe ser preservado convenientemente, no es suficiente con su calificación de Bien de Interés Cultural. Se hacen vitales la existencia de un Centro de Interpretación, aislamiento contra el vandalismo y visitas guiadas que orienten al visitante para que este pueda tomar conciencia de que lo que tiene ante sus ojos, el aire que respira y el suelo que pisa son suyos, sí, pero, fundamentalmente, de aquellos antepasados que lo levantaron y de los que quedan por venir. 

Para entender, es preciso conocer. 
Que el conocimiento, pues, rija nuestras palabras y, sobre todo, nuestros hechos. Que él se imponga en el cerebro de todo aquel que visite este mágico lugar.


Os dejo con una fotografía que recoge, según los expertos, la representación mediante rasgos incisos inferiores a 1 mm de grosor de la cabeza de un asno salvaje (petroglifo del Paleolítico), Panel 2. Parece milagroso que haya sobrevivido al paso de tantos milenios, pero ahí está, preciso y precioso...

d. Estilizado perfil de cabeza de asno salvaje