sábado, 26 de octubre de 2013

CONJUNTO DE ELEMENTOS "menores" EN EL BARCO DE ÁVILA (Ávila)

Introducción:
En una de las puertas de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de esta localidad abulense, en un espacio de apenas 40 metros cuadrados y antes de penetrar en el templo, bajo la sempiterna supervisión de la sobria portada gótica, quien vaya mirando el suelo enlosado -además de a la fachada y a otras alturas-, aquel que busca más allá de lo que a primera vista se ve, tiene la oportunidad de toparse con un curiosísimo conjunto de elementos que están allí recogidos y que deleitan la vista del amante de estos asuntos.

   Cartel anunciador con la iglesia como fondo



Portada gótica y el solado donde se encuentran los grabados



La misma fotografía que la anterior, con los descriptores y las flechas señaladoras



Relación de elementos:
A) En el umbral de la portada, allí por donde los fieles no penetraban en la iglesia en la mayoría de ocasiones, pues el acceso más usado -y así lo atestigua el rebaje de la piedra- se sitúa más a la izquierda, coincidiendo con la puerta pequeña, alguien talló en su día 25 hoyuelos (5 x 5) alineados: un alquerque de 12, sin líneas y muy bien conservado.

 
Fotografía del alquerque de 12 fichas de cada color



B) En dos de las lanchas de granito, se recogen sendas representaciones de equinos o bóvidos.
El primero - de mayor tamaño- parece pastar, y está acompañado de trazos que podrían formar parte de alguna escritura o ser restos de otros zoomorfos.
El segundo -muy erosionado- es menor y no presenta las cuatro patas, al contrario de su hermano ya descrito, sino dos (las otras estarían ocultas tras las que se ven).

El primero de los cuadrúpedos, con prolongado/a rabo/cola...



 
El segundo zoomorfo



C) Tres son las que hay e interpreto -no sé si acertadamente- como losas de tumbas: dos de ellas con plantas humanas calzadas, y una tercera que no presenta ningún grabado más que las líneas laterales (al estar cercenada, tal vez lo que había grabado se lo llevó el corte).
Ya los romanos representaron pies y mano humanos en piedras, pero los pies -los leo como tales- de El Barco de Ávila parecen ser posteriores y no estar acompañadas de ninguna letra de ningún alfabeto.

La primera y más vistosa de las cubiertas de las tumbas.
Se aprecian dos huellas calzadas de pies humanos, enmarcadas
 en un rectángulo, más las dos líneas longitudinales



Detalle de la primera losa




La misma fotografía que la anterior, en negativo



La segunda de las cubiertas de una tumba.
Tiene una sola huella y en la parte izquierda parece
adivinarse algún círculo u otro grabado geométrico.



La misma fotografía que la anterior, en negativo


La tercera cubierta de tumba, la que menos datos nos aporta...
En la lancha contigua, una cazoleta.




D) En otra laja de granito, hay representados más signos o antropomorfos, aunque están cubiertos parcialmente con cemento y es muy difícil apuntar siquiera una lectura aproximada de lo grabado. En esta fotografía se puede ver lo dicho inmediatamente antes:





Breves apuntes finales:
La riqueza de los edificios religiosos españoles es tan diversa como incalculable. En general, las personas que los visitan por dentro y por fuera se fijan más en los elementos -llamémosles así- "llamativos", más espectaculares, y es normal. Sin embargo, más allá de los frisos, arquivoltas, ventanas, columnas, retablos, arquitrabes, etc, etc, otras piezas -llamémoslas así- "menores" conviven con las primeras sin ser tan protagonistas como éstas, aunque poseen una potente entidad propia que las hace únicas y merecedoras de localización, estudio, difusión y visita, constituyendo lo que yo vengo a llamar "arqueología minoritaria", ésa que sólo los que van buscándola la ven.
Creo que va siendo hora de que las visitas guiadas las recojan en su repertorio y las autoridades competentes en la materia se ocupen de ellas como es debido, porque poseen la suficiente enjundia como para ser mimadas.
Y, por último, permíteme un simbólico y modesto consejo: "Antes de subir al elefante, échale un vistazo al suelo que le rodea y sustenta: tal vez, des con auténticos tesoros", bellas alhajas como éstas de la portada gótica de la Iglesia de la Asuncion de Nuestra Señora, en la localidad de El Barco de Ávila.

¡Suerte y a por ello, pues!